La piedra del barrio antiguo de Girona se cuela por puertas, ventanas, y fachada del nuevo restaurante que dirige el chef Pere Massana (una estrella Michelín) en el centro histórico de la ciudad y de cuyo interiorismo se ha encargado Francesc Rifé Studio. En él, la piedra se convierte en la protagonista de todo el proyecto y consigue alcanzar su versión más contemporánea en la estructura que cubre todo el techo del NU.
En la cocina de Pere Massana se apuesta por recuperar los orígenes, el valor del producto en su estado natural, desnudando sus piezas hasta llegar a lo esencial. Para crear un proyecto arquitectónico acorde con ese concepto el cocinero catalán se alió con el estudio de interiorismo de Francesc Rifé, que buscó el material que mejor reflejase esa apuesta por los orígenes: la piedra natural.
Para el exterior, se ha apostado por crear diferentes relieves con piedra natural pero cubriendo sólo parcialmente la fachada con el fin de respetar la intimidad de los clientes. Esta actuación permite, además, poder admirar desde el exterior el minucioso despiece en piedra del techo, proyectado como continuación del lenguaje de verticalidad que da la fachada. Su diseño se ha hecho siguiendo los esquemas de una cuadrícula y creando espacios en negativo que permitieran camuflar la instalación de puntos de luz, altavoces o elementos de climatización como los difusores de impulsión de aire.
A lo largo de la planta se encuentra uno de los elementos más importantes del proyecto: una gran barra que se convierte en todo un palco de lujo para el cliente que, por el mismo precio, puede disfrutar de los sabores originales del mediterráneo y contemplar a la vez la elaboración de los platos fríos. Para la barra se ha utilizado la misma piedra clara que el suelo, provocando así un mayor contraste con el revestimiento de opalina tratada de color verde-naturaleza y la madera oscura del mobiliario, en este caso la silla modelo Twone diseñada por el propio Rifé para Ziru.
Enfrentada a la barra, se ha dispuesto una línea longitudinal de mesas apoyadas sobre un banco de obra tapizado que recorre todo el largo del espacio y que se apoya bajo los grandes ventanales.
Tras la barra y accediendo por la zona intermedia en la que se ubica la bodega, se llega a los baños. Desde este punto y a través de un cristal, se visualiza la escalera que da acceso a la planta inferior, donde se encuentra el almacén y los vestuarios del personal.
Al final de la sala, se ha ubicado la zona de cocina más elaborada, visible para el cliente, así como la zona de cámaras y limpieza a la que se accede por una puerta corredera y con salida independiente al exterior.
En definitiva, un restaurante que desnuda sus productos ante el cliente y un proyecto que desnuda la piedra, juega con ella, le da forma tridimensional y la combina con espacios en negro proyectados en el techo que consiguen, finalmente, devolvernos la escala visual de un espacio que viste y satisface el paladar más exigente.
Texto: Yolanda Terramera.
Fotografías: Fernando Alda (www.fernandoalda.com).
Sobre Francesc Rifé:
La carrera profesional de Francesc Rifé (Sant Sadurní d’Anoia, 1969) se inicia durante su periodo de formación y, tras colaborar con varios estudios de diseño y arquitectura, funda su propio estudio en Barcelona, en 1994. Sus proyectos abarcan desde el diseño industrial al de interiores, tanto en el ámbito privado como en el comercial. Durante su trayectoria ha recibido varios premios de diseño como los Contract World Awards, ICFF Editors Awards, Premios FAD y Premios Ascer. Sus trabajos han sido publicados en distintos libros especializados, las mejores revistas del sector y otros medios. Actualmente compagina su trabajo con la docencia.
Información e imágenes facilitadas por Francesc Rifé Studio
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