¿Qué cara pondría Arne Jacobsen si viera su propia casa de Charlottenlund (1928), convertida en una casa de muñecas de diseño? Nunca lo sabremos. Quién se ha atrevido a hacer realidad la idea ha sido la firma danesa Minimii, que ya comercializa las réplicas a escala 1:16 desde su página web, aunque también acepta pedidos a escala 1:12. Lo que no ha especificado, por el momento, es su precio.
La artífice de la "reconversión" de la vivienda es Linda Sternberg, directora creativa de la firma. Sternberg estaba buscando una casa de muñecas para sus hijas y no le convencían los modelos que veía en el mercado. Le planteó la idea a su socio, Højer Claus Hansen, y éste también se emocionó con ella. Incluso los descendientes de Arne Jacobsen han bendecido el proyecto y proporcionado planos de la casa original.
En su versión en miniatura, la casita puede montarse y desmontarse fácilmente mediante un sistema de imanes, ya que tanto las paredes como el techo y los suelos incorporan una fina lámina de hierro.
Y como una casita de diseño merecía un mobiliario acorde a su status, Minimii también fabrica modelos en miniatura del mobiliario de Jacobsen (la silla Ant y la Egg) y de otros diseñadores de muebles, iluminación, arte y otros elementos decorativos, que se enmarcan en la estética de esta casa de muñecas. Con la casa vienen incluidos una pequeña colección de muebles de diseño, piezas de arte y accesorios magnéticos.
¿Una casa de muñecas para niños o para adultos...?
Vía: Inhabitots
Más información: Minimii
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